Carlos Gardel
Carlos Gardel (1890-1935) fue un cantante
y compositor argentino, considerado uno de los artistas más populares de la
Argentina, aún a casi ochenta años de su muerte. En Argentina “ser Gardel”
equivale a ser un ganador y un triunfador. Su fama fue una de las razones por
las cuales el tango se convirtió en sinónimo de la música argentina en el mundo
y al auge que ese genero musical tuvo en Argentina hasta los años ’60, y que
permanece en cierta forma hasta nuestros días.
La lista de tangos que
compuso e interpretó es larga y extensa, e incluye títulos como “El día que me
quieras”, “Volver”, “Por una cabeza”, “Rubias de New York”, “Lejana tierra
mía”, “Mi Buenos Aires Querido”, etc.
Como toda figura mítica su
nacimiento siempre estuvo rodeado de misterio. La versión más aceptada es que
habría nacido en Toulouse (Francia) el 11 de diciembre de 1890 como “Charles
Romuald Gardes”. Los uruguayos inventaron la versión de que habría nacido en
Tacuarembó tres años antes. También se dice que ya había cumplido cincuenta
años al momento de morir. Lo cierto es que en 1893 ya vivía en Argentina, que
tenía la ciudadanía argentina, que Buenos Aires siempre fue su ciudad y la zona
del Abasto, su lugar en el mundo.
Debido a esto a Carlos Gardel
siempre se lo conoció como “morocho del Abasto” además de “el Zorzal” y “el
Mudo”. Comenzó a dedicarse al tango a partir de 1910 y a fines de esa década
alcanzó la fama, primero en Argentina, y luego en el Mundo entero, siendo una
figura muy reconocida en muchos países de Europa y las Américas. Realizaba
giras por el mundo y se encontraba en Medellín (Colombia) cuando falleció en un
accidente aéreo el 24 de junio de 1935.
A sus funerales, en Buenos Aires, concurrieron miles de personas, en una muestra de dolor popular solo comparable al de exequias de líderes políticos como Hipólito Yrigoyen o Eva Perón.
Julio Jorge Nelson, conductor de radio y televisión; y uno de los más grandes fanáticos y difusores de la música del "Zorzal criollo", fue responsable no solo de que sus grabaciones siguieran en el aire luego de la muerte del cantante, sino que además creó una frase referida a su ídolo: “cada día canta mejor”, que se ha hecho muy popular y famosa hasta hoy en día en la Argentina.
Lejos de apagarse con el tiempo, su mito continua inalterable en los porteños, su rostro se ha convertido en un símbolo de Buenos Aires y de Argentina, y a modo de homenaje una calle y una estación de subte (metro) llevan su nombre, en la zona del Abasto.
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